
Terapeuta, novelista, coach TDAH, compositor y cantante el chileno Jorge Orrego es sobre todo un artista de las encrucijadas: un sabio ecléctico, un chamán burlón, danzando allí donde se cruzan, solemnemente, los caminos que no van a ningún sitio. A ciencia cierta, uno no acaba de saber qué está leyendo cuando lee un libro de Orrego: no es literatura ni psicología; no es ficción ni documento ni ensayo: es un poco de todo, y nada definible de una vez... Pero es precisamente esta ausencia de un lugar concreto –de un “topos” fijo y regular que provea de un semblante a su escritura–, lo que deja en las obras de Orrego el efecto imprevisto de una tirada de dados: la ruptura –del lado del lector– con la narcosis de lo conocido, las inercias, los hábitos; la promesa nunca defraudada de una exploración y una aventura.
A la aventura personalísima y en marcha de un saber traspasado por la imaginación, lo irracional, el arte y la magia, nos asoma este libro: La biblioteca de Marko recientemente publicado por Ultra-amateur y Publidisa. Una autobiografía imaginaria, pues, en donde la escritura de Orrego concede un mismo rango al hecho y a la posibilidad, a la fabulación y al recuerdo... Pues “lo objetivo” es justamente esa no-vida en que me pierdo y me desconozco (ese “relato” en donde me hago objeto), y a la inversa: no hay reconocimiento ni encuentro consigo que no beba en las aguas de la invención.